Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU son una serie de metas que los Estados miembros se comprometieron a cumplir para 2030. En total, son 17 objetivos diferentes cuyos beneficios pueden resumirse en tres pilares: erradicación de la pobreza, protección del planeta y mejora de la vida de las personas de todo el mundo. Aunque fueron los líderes mundiales quienes se comprometieron en 2015 a cumplir con estos objetivos, su consecución es tarea de todos.
En la Cumbre sobre este tema celebrada en septiembre de 2019, tras cinco años de trabajo, se llegó a la conclusión de que el esfuerzo acometido es aún insuficiente. Las medidas y los resultados, aunque progresan, no lo hacen al ritmo esperado y necesario. Por ello, desde la ONU se ha realizado un llamamiento a todos los sectores de la sociedad para que en esta década que nos queda por delante, estos objetivos pertenecientes a la Agenda 2030 puedan ser una realidad.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son 17 metas que vienen a reforzar a los Objetivos del Milenio que se adoptaron en el año 2000. Estos son los ODS que deben ser una realidad en 2030:
1. Erradicar la pobreza
2. Hambre cero
3. Salud y Bienestar
4. Educación de calidad
5. Igualdad de género
6. Agua limpia y saneamiento
7. Energía asequible y no contaminante
8. Trabajo decente y crecimiento económico
9. Industria, Innovación e Infraestructura
10. Reducción de las desigualdades
11. Ciudades y comunidades sostenibles
12. Producción y consumo responsables
13. Acción por el clima
14. Vida submarina
15. Vida de ecosistemas terrestres
16. Paz, justicia e instituciones sólidas
17. Alianza para lograr los objetivos
Están especialmente dedicados a los países y personas que se encuentran en situaciones de mayor riesgo, exclusión y vulneración. No obstante, el cumplimiento de todos estos objetivos supondría un beneficio para todas las personas y una mejora de la calidad de vida de todos.
La ONU cuenta con todos nosotros
Muchos podrían pensar que su colaboración individual no es suficiente, que no va a cambiar el mundo con ella. Es una idea errónea: la consecución de estas metas es tarea y deber de todos. Que se conviertan en realidad depende también de lo que hagamos cada uno de nosotros, de la gotita de agua que aportemos a este océano.
La ONU es consciente de ello, e insta a todos los ciudadanos a que adopten como suyos estos objetivos ya que es fundamental su actuación. Precisamente, ha establecido tres niveles de actuación. El primero de ellos es la ‘acción a nivel mundial’, referente al esfuerzo por parte de los líderes mundiales. En segundo lugar, la ‘acción a nivel local’, que se refiere a las instituciones y gobiernos locales. Y en tercer lugar, la ‘acción por parte de las personas’, que incluye a toda la sociedad: desde medios de comunicación, sindicatos, sector privado… hasta cada uno de los ciudadanos.
España cumple con los Objetivos de Desarrollo Sostenible
El sector empresarial tiene mucho que decir en este sentido. El nivel de ‘acción por parte de las personas’ apunta directamente a ellos también. España es un país ejemplar en este sentido, ya que es el país que más empresas se han comprometido a cumplir con esos objetivos. Según Cristina Sánchez, directora ejecutiva de la Red Española del Pacto Mundial, son 1.354 empresas las que han asumido los ODS. De ellas, el 60% son PYMES, el 23% son grandes empresas y el resto, el 17%, está compuesto por tercer sector, sindicatos e instituciones educativas.
En el último informe de la Red Española del Pacto Mundial, se desprende que el compromiso de las empresas españolas ha aumentado con respecto a informes anteriores. El 86% de las compañías incluyen información sobre los objetivos en sus memorias de sostenibilidad de 2019. Si se compara con el primer informe, de 2016, supone un crecimiento del 76%. Sin embargo, los resultados señalan que son pocas las firmas que establecen compromisos y medidas cuantificables: tan solo el 20%. Es en este sentido en el que las empresas han de trabajar más, en que sus esfuerzos sean reales y puedan ser medidos y analizados.
Los objetivos que más preocupan y son considerados como prioritarios por parte de las empresas que pertenecen al IBEX35, según este informe, son los ODS 8, 13, 9, 17 y 7. Por el contrario, aquellos ODS que se encuentran olvidados por el sector empresarial español son el ODS 2, 14, 1 y 15.
Los ODS, parte de la estrategia empresarial
La ONU insiste en que es fundamental la colaboración de las empresas, cuyo papel lo sitúa al mismo nivel que el de la sociedad civil y los estados. Por tanto, tienen un peso muy considerable para que en 2030 estos ODS sean una realidad. Es importante su compromiso para el bien del planeta y de la sociedad, pero también para las propias empresas. Cumplir con estos objetivos puede convertirse, según señala la ONU, “en una parte esencial de su estrategia empresarial y de operaciones además, de un elemento fundamental para garantizar su sostenibilidad a largo plazo y generar oportunidades de negocio ligadas al desarrollo”.
Además de la necesidad urgente para mejorar las vida de las personas, este compromiso de las compañías con los ODS pueden repercutir en beneficios empresariales, tal y como apunta las Naciones Unidas. Dicho compromiso puede ser un aspecto diferenciador de la RSC, la responsabilidad social corporativa de la empresa, e incluso convertirse en una oportunidad de negocio.
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